César López – Ingeniero

¡Los bienes raíces no son la excepción! Todo el mundo está en alerta por el brote de COVID-19 que se produjo en Wuhan, China. Ya son más de 100 mil los casos de infectados en distintos países. Además de las innumerables muertes que se han producido, algo muy lamentable, este virus también afecta al sector inmobiliario.

Más allá de la prevención y de los cambios de rutinas que se han tenido que realizar, este sector de la economía ha tenido que sobrellevar la situación. Por ejemplo, con todo este caos, los cambios en los estilos de vida (causados por la tecnología) se han puesto de mayor relieve.

Ahora ha crecido la necesidad de trabajar remotamente, de resolver los asuntos inmobiliarios desde la distancia, cosa que ya se venía haciendo pero no con tanta urgencia. La empresa gestora de fondos de inversión global, Janus Henderson, con sede en Londres, realizó una investigación en la que señala que se incrementaron las ventas de propiedades por Internet.

Es decir, que pese a la crisis que se ha desencadenado por el coronavirus, la industria inmobiliaria ha sabido responder.

Según datos de South China Morning Post se han registrado más de 47 mil operaciones con un valor de 8.300 millones de dólares, que en euros serían unos 7.660 millones. Por otra parte, la firma Janus Henderson asegura que las empresas dedicadas al procesamiento de datos, comenzarán a crecer como medios alternativos.

Si analizamos desde otro punto de vista, el estudio hecho por la gestora puntualiza que en la primera semana de febrero, cayó en  90% la compra-venta de casas en las 36 principales ciudades chinas en comparación con el año pasado.

En Estados Unidos, sobre todo en Nueva York y California, se han planteado nuevos retos en vista de que las medidas preventivas, por ejemplo, con los viajeros, puede que frene la llegada de grandes inversionistas que actualmente se debaten en la incertidumbre de saber cuándo y cómo podrán movilizarse hacia las propiedades que pretenden adquirir. Otro hecho que ha ocurrido es que para captar a más consumidores, se han bajado las tasas hipotecarias.

El pasado 10 de marzo se conoció que fue pospuesto uno de los eventos de mayor envergadura del mundo inmobiliario en España: El  Salón Inmobiliario Internacional de Madrid (Sima), el cual se iba a realizar entre el 7 y 10 de mayo de este año, todo en vista de que el virus también se ha propagado en este país.

Otra actividad relevante del sector en Europa que también se retrasó fue el Mercado Mundial de los Profesionales en Inmuebles (MIPIM) por sus siglas en francés, que tenía lugar en este país exactamente en esta semana y fue cambiado de fecha para el mes de junio, esperando que se avance de manera positiva frente al COVID-19.

El coronavirus ha afectado muchas transacciones inmobiliarias en todo el mundo, hay prácticamente ciudades enteras en cuarentena y esto genera una caída importante en todos estos movimientos.

Así es como vive el sector inmobiliario el brote de este virus, deseando que muy pronto se logre erradicar, que no se produzcan más muertes y que todo pueda volver a la normalidad. Se han preguntado ¿Cómo les afecta el coronavirus en sus negocios?

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